LA FP, UNA OPORTUNIDAD PARA GENERAR EMPLEO

Demasiados años perdidos en debates estériles, en reformas educativas marcadas por un incuestionable sello ideológico. Siete reformas en más de 35 años no han servido para consolidar un sistema que sigue sin contar con los elementos que necesita para facilitar el tránsito del estudiante hacia el mercado laboral. Ni existe esa interconexión en el sistema vigente ni en la denominada Ley Wert. Tras el cierre de la crisis abierta por el ministro al tratar de imponer el 6,5 como nota mínima para acceder a una beca, y abdicar en su propósito reduciendo la misma hasta un 5,5, existen otros debates que plantea la reforma que el Gobierno ha puesto sobre la mesa. Entre ellos, el futuro de la Formación Profesional.

 

NUEVE ESCENAS PARA LA REFLEXIÓN

Nueve escenas que sirven para reflexionar sobre las políticas que emprende el Gobierno del Estado y que, en muchas ocasiones, generan desasosiego, desequilibrios y más empobrecimiento.

 

¿POR QUÉ APOYAMOS EL ACUERDO EUROPEO?

Tan poco acostumbrados estamos en este país a abrir debates políticos que permitan lograr un consenso y crear sinergias entre todas las fuerzas políticas, que las desafortunadas formas utilizadas por el PP y el PSOE para sellar un acuerdo global de cara al próximo Consejo Europeo provocaron que muchos partidos, predispuestos a sumarse a la iniciativa, optaran por plantarse y desmarcarse del texto elaborado por los dos partidos con mayor representatividad en las Cortes Generales.

 

El PP bloquea una iniciativa de Oramas para exigir al Gobierno que fije una cuota del 9% del atún rojo para la flota canaria

La oposición del Partido Popular (PP) impidió que hoy prosperase una iniciativa defendida por la diputada de Coalición Canaria-Nueva Canarias (CC-NC), Ana Oramas, en la que solicitaba que el Gobierno del Estado modificase la cuota de atún rojo asignada a Canarias, llegando al 9% del total de España, “atendiendo en el reparto a verdaderos criterios históricos y socioeconómicos de nuestra flota durante varias décadas y no los aplicados hasta la fecha”.

 

EL PAÍS QUE FUE

Apenas han pasado diecisiete meses desde la celebración de las elecciones que auparon a Mariano Rajoy y al Partido Popular al Palacio de la Moncloa. No han transcurrido ni dos años de aquel día en el que la mayoría de los electores decidió entregar el futuro de nuestro país a un partido que les prometió el retorno de la confianza, la creación de empleo y un futuro de prosperidad y progreso económico. Pese a que aún no hemos cruzado el ecuador de la legislatura, ya nada queda de las vanas promesas de entonces.

 

ECHAR MÁS SAL EN LAS HERIDAS DE LA CRISIS

El Partido Popular vetó la semana pasada en el Congreso una iniciativa en la que se exigía al Gobierno que mantuviese su apoyo al Plan Concertado de prestaciones básicas de servicios sociales en las corporaciones locales. Los populares evitaron con su voto en contra que prosperase una propuesta necesaria para garantizar el único apoyo en el que se sustentan cada vez más familias.

 

LAS PENSIONES NO SE REFORMAN NI SE IMPONEN POR DECRETO

Conocemos el difícil escenario al que nos enfrentamos pero, sin embargo, no estamos dispuestos a ser cómplices de un Gobierno que recurre cada viernes a la misma estrategia basada en la imposición. Una estrategia recurrente consistente en la aprobación de decretos en los Consejos de Ministros de manera unilateral, puenteando el diálogo con los agentes económicos y sociales, y con las fuerzas políticas.

 

“SON OTROS LOS QUE MARCAN LOS TIEMPOS A ESPAÑA EN EUROPA”

El Consejo Europeo celebrado el pasado mes de marzo sirvió básicamente para certificar la fuerte parálisis que existe en el máximo órgano comunitario y para multiplicar la frustración y la desconfianza que se consolida con respecto a una cumbre que es manifiestamente incapaz de tomar decisiones que sirvan para favorecer el crecimiento y el empleo.

 

LA GENERACIÓN QUE SE NIEGA A PERDER

Resulta descorazonador comprobar cada viernes cómo después de cada Consejo de Ministros, la vicepresidenta del Gobierno trata de convencernos de que las políticas de recortes que aprueba el Ejecutivo sirven para sembrar el futuro que aflorará una vez que remita la crisis. Políticas que, lejos de ser el germen que genere esperanza, son el embrión que cercenará aún más las posibilidades de las nuevas generaciones. Políticas que, al contrario de lo que nos aseguran, comprometen seriamente el bienestar del presente y las opciones de futuro.

 

LA ECONOMÍA DEL FUTURO

La crisis se desplaza como un ciclón que arrasa con todo y que amenaza con dejar tras de sí un erial en nuestra economía. Un desierto sobre el que tendremos que levantar los cimientos para construir un nuevo sistema que nos permita ser más competitivos en futuros periodos de recesión económica. No será la primera vez que lo hagamos en Canarias. En nuestra historia existen ejemplos sobre cómo nuestros antepasados tuvieron que pasar página en periodos de crisis y apostar por la explotación de nuevos productos. Sin embargo, hay un principio que siempre se repite: siempre nos la hemos jugado a una sola carta, a un solo monocultivo. Y ese es un error sobre el que tenemos que tomar nota para no volver a tropezar con la misma piedra.