Canaria se ha sumado al proceso iniciado para alcanzar un pacto de estado de los grupos políticos que facilite la salida de la crisis. Así lo demanda una gran mayoría de la población y así, entre otros, lo hemos propuesto  desde Coalición Canaria durante todo el año pasado.

Se aborda con retraso, pero al fin se aborda. Se aborda sin toda la profundidad necesaria, pero aun así son preferibles acuerdos parciales que continuar sin ningún marco de entendimiento. Eso acentuaría la debilidad del Gobierno tanto ante el exterior como ante los grupos de presión. Y no necesitamos de ambiguedades, sino de una cierta firmeza para producir los ajustes necesarios.

De acuerdo con lo que siempre ha sido la tradición de Coalición Canaria, hemos propuesto al Gobierno una serie de medidas específicas para nuestro archipiélago. Porque la simple aplicación de los planes estatales se queda en muchos puntos sin ningún efecto de Cádiz para abajo. ¿Que reactivo supone en nuestras islas rebajar el IVA para la rehabilitación de viviendas cuando aquí no se aplica ese impuesto?

Por ello, para lograr el mismo impulso que en la Península, es preciso que el Gobierno adopte aquí otras medidas  que no estaban en su borrador inicial. Coalición Canaria le presentó veintisiete medidas específicas referidas a Canarias; alguna de ellas ya reiteradas en otras ocasiones. Sobre las que habrá que debatir y pelear en las próximas semanas.

A nadie se le oculta que es difícil ahora extraer compromisos de más gasto en Canarias, cuando en el Ministerio de Hacienda se aprestan a recortar por más de 5.000 millones de euros sus previsiones de este año; y otros 35.000 en los próximos tres ejercicios. Pero hemos de procurar la máxima eficacia para los recursos disponibles.

Hemos de reforzar la línea de créditos blandos para las empresas industriales valientes que decidan seguir invirtiendo en Canarias en estos duros momentos. Hemos de impulsar en Canarias esos nuevos fondos del ICO para aquellas pymes a las que la banca les niega oxígeno. Hemos de profundizare en la rebaja de las tarifas aéreas, que haga más competitiva nuestra oferta turística. Hemos de estrenar en Canarias la llamada “quinta libertad” aérea, que permita que recalen aquí vuelos extracomunitarios; y hemos de impulsar de una vez pro todas un nuevo sistema de promoción para captar tráfico aéreo. Hemos de seguir construyendo más activamente esa gran base logística canaria que nos permita actuar en los mercados cercanos para crear empleo interno y procurar más servicios al exterior. Y mantener las bonificaciones en las tasas portuarias y no seguir dilatando las nuevas infraestructuras es esencial para que este gran proyecto no se detenga y lleguemos a ser un punto de referencia imprescindible en toda el área atlántica.

La actualidad reciente ha puesto en evidencia la fragilidad de nuestro sistema eléctrico, la necesidad de garantizar mejores formas de financiación de sus sobrecostes y la urgencia de diversificar sus fuentes para rebajar el gasto y  las emisiones contaminantes con las plantas de gas.

La intensificación de las medidas de impulso al sector turístico son claves para la recuperación. Y los esfuerzos de promoción pública han de verse correspondidos por el propio sector, al menos en la misma medida que ya esta demostrando la industria canaria.

El apoyo financiero y político efectivo a la instalación en Canarias del Telescopio Extremadamente Grande (E-ELT) constituye  una acción decisiva para que Canarias siga estando a la cabeza de la astronomía mundial y se impulse aquí toda un sector tecnológico de alto nivel.

Seguiremos impulsando medidas que contribuyan a que la recuperación sea efectiva en Canarias. Aun a sabiendas de que el principal impulso debe venir y vendrá de los canarios más comprometidos y emprendedores. Así ocurrió en el pasado. Así debemos trabajar en este presente tan difícil.

 

Leave a reply