Canarias ha dejado de estar a la cabeza del paro en España. En el primer trimestre del año hemos reducido medio punto la tasa de paro del INE, justamente cuando el país la aumentaba casi un punto, acercándose peligrosamente a los cinco millones de desempleados.

A pesar del fuerte aumento del número de personas que se incorporaron al mercado laboral en Canarias en los tres primeros meses del año (9.700), se ha podido reducir el paro porque se registraron 11.700 ocupados más. El comportamiento al alza del empleo en Canarias destacó por encima del resto, mientras que en cuatro regiones – Andalucía, Cataluña, Madrid y Comunidad Valenciana – se destruían 156.000 empleos. Como ha ocurrido en otras ocasiones, tanto la caida como la recuperación se adelantan  en Canarias, como la hora.

La noticia es esperanzadora en las Islas y debe darnos ánimos para seguir adoptando medidas que mejoren nuestros niveles de eficiencia y productividad, para que lo que ahora es más que un síntoma  se consolide como una tendencia. Debe estimular la confianza en nuestras posibilidades como ninguna otra noticia.

Sin duda, en nuestra recuperación ha sido el turismo uno de los factores esenciales. El Gobierno de Canarias centró en ese sector  sus iniciativas más relevantes, ya que el empleo no se crea tanto por incentivos y subvenciones como por medidas que estimulen la demanda de productos y servicios o reduzcan las barreras del tejido productivo.

La lucha tenaz del Gobierno Autónomo y de Coalición Canaria para que se rebajaran primero las tasas aéreas en 2010 y se mantuviera la reducción durante el año 2011 ha facilitado una mayor afluencia de visitantes desde los mercados europeos, aunque el turismo peninsular no logra todavía remontar por la caída general del consumo en el país.

Apalancados en el repunte de la afluencia turística previsto para el resto del año, es hora de que el sector retome la suficiente confianza como para producir la rehabilitación de toda una serie de hoteles y apartamentos. Se recuperaría así al menos una parte del empleo perdido en la construcción. Para ello hemos generado fondos de ayuda conjuntos del Estado y Canarias, con una estrategia que permita fortalecer al sector ante la competencia creciente de los nuevos destinos.

Reforzar el turismo como el más rápido y seguro camino hacia la recuperación no nos ha de hacer olvidar la inmensa tarea que tenemos por delante para convertir a Canarias en una plataforma logística de primer orden, que abra además nuevas oportunidades para la industria y agricultura locales.