Desde el pasado mes de marzo, Coalición Canaria mantiene en el Congreso y en el Senado una estrategia  clara y firme: comprometer en mayor medida al Estado en medidas específicas para Canarias, a la vista del mayor impacto del desempleo en nuestras islas.

Se ha podido ir articulando un amplio consenso sobre la necesidad de un conjunto de actuaciones que diferenciaran las medidas anticrisis a aplicar en Canarias de las establecidas en la España continental. Porque muchas  de las que se pusieron en marcha en la Península  aquí no tienen efecto, ya que nuestra estructura productiva es muy diferente y no se han puesto en marcha grandes sistemas de ayuda para los sectores de la construcción y el turismo, los más afectados en Canarias.

Rodríguez Zapatero aceptó hace meses nuestros planteamientos  e inició algunas medidas de corto alcance, especialmente centradas en el sector turístico, al ser el que con más rapidez puede detener la destrucción de tejido productivo en Canarias y constituirse de nuevo en motor de la recuperación. Porque, con independencia de que a medio y largo plazo consigamos diversificar nuestra economía, el turismo seguirá siendo un pilar maestro para sostener la actividad y el empleo.

En su comparecencia de esta semana en el Congreso, el presidente del Gobierno volvía a reiterar su compromiso de llevar adelante lo que llamó “una estrategia integral para Canarias”, a partir de los acuerdos que tomará en Canarias el Consejo de Ministros el próximo 9 de octubre. En dicha sesión se revisarán los compromisos de carácter plurianual de los diferentes convenios de obras entre el Estado y Canarias. Se articularán nuevas iniciativas de apoyo al turismo; se iniciará la reforma del Régimen Económico y Fiscal de Canarias; y se relanzarán las acciones tendentes a la proyección de Canarias como gran plataforma hacia África y América, que constituye una de nuestras mayores oportunidades tanto para la generación de nuevos empleos en el ámbito de la logística y el transporte como para tener una presencia activa y solidaria  en la cooperación con el vecino continente, el área más empobrecida del mundo.

Durante la sesión parlamentaria le recordé al presidente del Gobierno que, con alguna pequeña excepción en materia de crédito turístico y de reducción parcial de las tasas aéreas, el paquete de medidas que Coalición Canaria propuso y fue aprobado por el Congreso el pasado mes de marzo no ha sido desarrollado con la agilidad que la grave situación económica requiere. Porque han derivado la mayoría de  las acciones al Consejo de Ministros del mes de octubre.

La excepcionalidad de la situación canaria ha sido reconocida reiteradamente por el Gobierno estatal a lo largo del año, pero no se ha pasado de las palabras a los hechos. Ni siquiera en la inversión directa (no solo de créditos bonificados) en la rehabilitación de los espacios públicos turísticos. O en intensificar la promoción turística. Se ha coincidido con Coalición Canaria en el diagnóstico y en las tareas a realizar por el Estado, pero se han demorado seis meses.

Veremos en las próximas semanas en qué medida las expectativas generadas se plasman en nuevas iniciativas que devuelvan el optimismo a la economía canaria y nos permitan retornar a la senda de la creación de empleo.